Frases

“No se cambian las cosas combatiendo la realidad actual. Para cambiar algo, es necesario crear un nuevo modelo, uno distinto que haga que el actual modelo quede obsoleto".

Richard Buckminster Fuller

lunes, 21 de diciembre de 2009

Política, Estados de Ánimo, y Temporalidad

Una de las claves principales que vemos en Coaching, tanto a nivel de organizaciones, como de personas, son los Estados de Ánimo preponderantes en ellas, ya que ellos cumplen una función primordial; nos predisponen a ciertas a acciones, lo que implica que dependiendo de ellos, se nos abren o cierran posibilidades.
Ahora, existen cuatro Estados de Ánimo (o Emocionales) Básicos: El Resentimiento, La Resignación, La Paz, y La Ambición (entendida como Ganas), las cuales detallo en la siguiente matriz:


Luego, por una parte, quienes se quedan “pegados” en hechos del pasado y que no pueden cambiar, sean buenos o malos, y no aceptan lo acontecido, están en el Resentimiento. Y por el contrario, quienes aceptan estos hechos, no significando esto que la situación les guste, entran en la Paz, y pueden avanzar en sus vidas abriéndose a un mundo de posibilidades.

Por otra parte, quienes ven el futuro poco auspicioso y sin posibilidades de hacer algo al respecto, a pesar que creen que las cosas sí podrían cambiar, están en la Resignación, perdiendo la posibilidad de cambiar las “cosas”. Y, por el contrario, quienes aceptan que los hechos sí se pueden cambiar y ven auspicioso el futuro, están en la Ambición ó Ganas, haciendo todo lo que está a su alcance para ir por aquellos cambios que producirán los resultados esperados.

Como podrán ver, los Estados de Ánimo tienen una carga de temporalidad: El Resentimiento y la Paz tienen que ver con el Pasado, y la Resignación y la Ambición, tienen que ver con el Futuro. Ahora, el Presente, tiene que ver con la Confianza. Sin confianza hoy, ya sea por lo acontecido en el pasado o por como vislumbramos el futuro, no podemos coordinación acciones con otros, ni podemos avanzar. La Confianza es vital para generar acciones.

¿Qué tiene que ver esto con política? Bueno, aquí entrego mi interpretación y “teoría”:
Tomando en cuenta lo planteado anteriormente, tengo el juicio que la Izquierda Chilena, en términos políticos, está en un estado de ánimo marcado por el Resentimiento. Se aferran demasiado al pasado, y les cuesta aceptar que al menos por ahora y por mucho tiempo más, que siempre habrán ricos y pobres, en vez de aceptar estas situaciones y quedar en “Paz” con ellos, y comenzar a ver qué posibilidades se les abren desde este nuevo estado de ánimo que expande la creatividad y la innovación.

Por otra parte, la Derecha Chilena, en términos políticos, está marcada por la Resignación: a pesar que crean que las cosas pueden cambiar, tienen el juicio que en el futuro las cosas seguirán igual, dado el “país” que tenemos. En vez de tomar esto como un dato, y desde ahí aportar.

Y, por otra parte, a mi juicio, lo que más nos divide como país, es el Presente en el que estamos. Un presente que carece de la Confianza necesaria entre un lado y otro, para poder coordinar juntos acciones que lleven a Chile al real progreso y desarrollo económico, cultural, social, y sobretodo, de civilización como sociedad integral, entiendo al otro como un legítimo otro, y construyendo un sentido de propósito común de país.

8 comentarios:

Pablo M. dijo...

Buen analáisis.
Hay que tener un poco de cuidado con el aspecto emocional de aquellos de izquierda que tienen un vínculo con los derechos humanos. No se puede dejar de lado eso así como así.
Saludos,

Pablo.

Carmen Parraguez dijo...

Me parece una interesante interpretación, y estoy muy de acuerdo con la ubicación de los estados de ánimo. Me surge la duda de como movilizar a la izquierda hacia la ambición sin la carga emotiva histórica que los ha movilizado, la de la rabia. Respecto de la resignación de la derecha, la juzgo algo acomodaticia ya que en lo que a proyectos personales se refiere me da la sensación que se manejan bastante bien en la ambición - ganas.

Entonces es una resignación para los otros y ambición para lo propio????

Carmen Parraguez dijo...

Rodrigo, algo así como una reconstrucción linguística de esto podría ser: " juzgo que estás en condiciones de vida indigna, juzgo que eso no está bien, y te hace sufrir, declaro que no puedo hacer nada al respecto ya que así es la vida", ahora en relación a lo que a mi vida compete declaro mis plenas capacidades para salvarme a mi y a los míos???

Marcela Duarte dijo...

Rodrigo, bueno el artículo.
Ahora tengo una duda, ¿en qué estado estarán todos aquellos que no se encajan ni de izquierda o derecha, todos aquellos que están desilusionados de la política, y de todos aquellos que "no están ni ahí" con la política.

Carmen, me gustó eso de la recontrucción lingüística. No entendí mucho, pero imagino que era como describir el estado emocional en palabras...

Cariños,

Marce.

Carmen Ortúzar dijo...

Está interesante tu comentario. Sin embargo, pienso que en política entran al juego otras emociones y circunstancias, también. De unos y otros, todas válidas, por supuesto, ya que como bien sabemos, cada cual mira y siente desde su experiencia y visión.
Respecto del comentario final... eso es verdad. Nos falta mucho como país para pensar y trabajar por el bien del país, un bien superior, sin mesquindades. Nos falta asumir que "cuando tú ganas, todos ganamos"... y viceversa. (Como en toda relación que uno aprecie).

Anónimo dijo...

Fe de ratas??
"La Resignación y la Paz tienen que ver con el Pasado"...no debería decir "El Resentimiento y la Paz..."?? Porque la resignación y la ambición van en el futuro...

Anónimo dijo...

Demasiado superficial el análisis. Además ¿bajo que teoría esos son las emociones básicas, desde el Couching, Couching Ontológico, etc?
Muy antojadizos algunos argumentos y poco rigurosos.

Saludos

Rodrigo Silva Ortúzar dijo...

Estimado Anónimo,
Gracias por participar con tus comentarios y por avisarme del error.

Respecto de tu inquietud, efectivamente me baso en las emociones básicas de la Ontología.

Saludos cordiales,

Rodrigo.